.¨BLACK IVRESSE¨.

Ayer fué una gran noche: César y yo recibimos el Premio Butaca al Mejor Vestuario 2009 por MORT DE DAMA, el premio del público que, unido al Premio de la Crítica que nos dieron hace un mes, ha sido la guinda para una temporada en la que hemos trabajado, sudado y sufrido pero que también hemos disfrutado.
Antes de asistir a la ceremonia estuve en la tienda- taller de El Delgado Buil con Jaume. Ellas son lo más guapo que he conocido en bastante tiempo y Jaume, como siempre, un ejemplo de educación, simpatía y saber... Salí de allí re-vestido con un total look naranja que me hacia sentir joven y distinto.
Llegué al MUSEU MARITIM ...

-Flash! Menudo cantazo.-

Todo yo era una flourescencia en una amalgama de aburrimiento estilistico mas negro que la NADA. Todo era negro, hasta la expresión de las caras de la gente que atónitos me repasaban como quien ve a Michael en Neverland. Entonces recorrió mi cuerpo un tremendo placer quasi orgásmico al comprender mi ausencia de miedo a la diferencia y al sentirme respaldado por el criterio de personas a quienes admiro (las niñas delgadas, el señor V.). César tambien apoyaba mi apuesta cromática con su preciosa camisa en vichy amarillo y negro.
Todas las predicciones que hice hace unos cuantos post se cumplieron: las actrices recicladas que vinieron del más allá, las rastas, las administrativas desubicadas, las maricas malas... pero todas de NEGRO.
En conclusión, desde ayer ODIO EL NEGRO. Este color en concepto parece apuesta segura pero no, ayer contemplé la prueba que demuestra que también es aniquilador y alienante.
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Hoy vuelta a la realidad tras la borrachera.
Renfe, clases, alumnos, TNC... muchas felicitaciones también. Estamos muy agradecidos.
Las muestras de cariño me han hecho soportar mejor la vuelta a casa en un vagón lleno de personas feas, desaliñadas y malolientes. No comprendo como hay tanta dejadez en lo que respecta al cuidado físico. Cuanta mecha grasienta, mucha pierna poste con zapato plano, mucha pereza... Vestirse debe convertirse en un acto lúdico o acto de gratitud hacia los demás: es, en cierto modo, decirles que nos importan y por ello nos mostramos lo mejor posible. Vestirse es querer agradar y maquillarse es potenciar lo mejor de una misma.
ES ASÍ.
Por lo tanto, proclamo mi intolerancia a la desgana popular que provoca que a veces opte por el autobus directo a mi casa, donde puedo dormirme sin ver tanta FEALDAD.